Estamos en verano, y dicen
algunos estudios que esta es la estación del año, donde más parejas se rompen y
a la vez donde más amores surgen. Esto pasa así desde tiempos remotos. No
importa la clase social, la etnia, sexo o edad. Cada uno podemos mirar dentro
de nosotros y recordaremos algún verano como el que describo.
Todos hemos tenido un gran amor.
Todos hemos tenido un/a “Ex”. Los pasos siempre son los mismos. Todo empieza
con ilusión, poco a poco no ves a esa persona en otro sitio que no sea junto a
tu lado. Le das toda tu confianza y ella pone todo de su parte, todo parece
idílico. Pero un día todo termina de pronto. Siempre hay señales, pero no las
ves hasta que es tarde. La primera sensación es la de incredulidad, no te crees
que esto te pueda estar pasando a ti. Piensas que es un bache más, que pronto
pasará, pero esta vez no pasa. En verdad no la necesitas, es lo primero que te
dices. Tú eres más que esa persona que te ha dejado en la estacada. Los miles
de bonitos recuerdos que tienes son tapados por unas estúpidas declaraciones o
gestos.
Pero todo lo cura el tiempo, y
con el paso vuelves a ver todo lo que te ha ofrecido esa persona, vuelves a
echarla de menos y llegado a este punto solo pueden pasar dos cosas. O los
caminos se cruzan y vuelven andar juntos, u otra ocupa esa parte de tu corazón.
Pero en ninguna de las dos opciones se debe olvidar lo que aportó esa persona
en tu vida.
Pues todo esto también pasa en el
fútbol. Este verano nuestra “ex” es una
pantera negra, que ha sido capaz de levantarnos para ovacionarle o maldecirle.
Odion Ighalo. Ha sido aclamado, desde 2ªB, hasta Primera. A nadie le deja
indiferente, y este año, vuelve a dejarnos como ese amor de verano. Es de
hipócritas no mirar atrás y ver todo lo que nos ha dado. Como en toda relación,
tú me das y yo te doy. Sus goles en Alcorcón, Elche o muchos en Primera como
contra el Sevilla en Pizjuán o Español en los Carmenes, nos han hecho un equipo
grande y que juega en la máxima categoría.
Pero también le han hecho a él
ser mejor delantero, más reconocimiento. Ya tuvimos antes de terminar la liga
esas señales que no se ven hasta que es tarde. Sus declaraciones de que quería
cobrar más a un mes de que terminara la liga eran la antesala de lo sucedido
este verano. A día de hoy nos ha dejado, no esta con nosotros, y no deja de
tontear con otros que no somos nosotros, como cuando dijo que su sueño era
jugar en la Premier. Es
normal que muchos lo vean como una falta de respeto. En verdad no le
necesitamos, nosotros le hemos dado más
de lo que él a nosotros. Cosas así se escuchan y leen por todos lados.
El tiempo pasará, y quizás nuestras vidas vuelvan
a correr juntas por los Carmenes. Pero por si no vuelven a darse la mano, estoy
seguro que con el tiempo nos alegraremos de tus éxitos, porque muy dentro de
nosotros y de ti, sabemos que esos éxitos son un poco gracias a nosotros. Al
igual que los nuestros, siempre llevaran un poco de tu firma.
Por suerte como dice el refrán,
un clavo saca otro clavo, y el vacío que dejarás en nuestra delantera será
cubierto por otro con ganas de ganar nuestro amor. Alguien que no vendrá a
ocupar tu lugar, si no a continuar el camino que comenzaste. Pues cada uno
somos la suma de las cosas que nos van pasando en la vida.
Este verano, Ighalo será nuestra “ex”.
