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domingo, 16 de septiembre de 2012

Granada vs Deportivo de la Coruña: Más de lo mismo.



Se dice que el hombre es el único animal que cae dos veces en la misma piedra. No le falta razón a esa afirmación. El ser humano, por desconocimiento, tozudez o ceguera suele tardar en ver los errores. Bueno, solo cuando son propios, cuando esos errores son ajenos, tenemos un don de verlos hasta donde a veces ni los hay.
El Granada, como su propio entrenador afirmó llegaba con la necesidad de los puntos. Uno en tres jornadas era un bagaje muy pobre. Y el recibir al Deportivo, aquel gran club de los noventa y dos mil, antes de la salida a Barcelona hacía casi una necesidad la victoria.
Anquela jugó toda la semana al despiste, y al final optó por la alineación más lógica a priori. Mainz volvía al eje de la defensa ante la baja de Borja. Nyom continuaba en el carril, pese a que apuntaba que Ortiz jugaría. Y en la banda entraría Torje, primera vez titular en liga, tras las buenas actuaciones con su selección. Brahimi esperaría su oportunidad desde el banquillo.
http://www.fiebredeportiva.es/wp-content/uploads/2012/09/imagennoticia14798_0.jpgEl equipo salió con idea de ir a por el partido. Y de salida mucho mejor que su rival. Torje y Nyom hicieron buenas internadas, eso si, ante uno de los laterales más flojos de la liga como es Evaldo. Pero ese aparente dominio duró muy poco. Por momentos y sin controlarlo del todo, el Depor se iba para arriba. No creaba jugadas de verdadero peligro, pero ganaba todos los saltos, los rechaces, la posesión y el Granada empezaba a no crear tanto peligro.  Y justamente de un mal control de Mainz, una peor cesión a Toño y un mal despeje de este, Nelson Oliveira que había entrado para sustituir a Riki, se aprovechaba y hacía el 0-1 en el minuto 40.
En el descanso, Arabi dejaba su sitio al nuevo fichaje Brahimi. A mi parecer dos jugadores muy parecidos. Abusan de la conducción de la pelota, del regate en sitios peligrosos, pero que poseen unas cualidades impresionantes y una visión de mucho nivel. Quizás Brahimi sea más eléctrico, y eso ayudó a que la pelota fuera mucho más rápida, pero si ambos aprendieran a dar el pase antes y asociarse con sus compañeros, serían mucho más rentables ambos.
En la segunda parte el Granada se marchó arriba a por el partido y fue cuando el Deportivo dispuso de las mejores ocasiones. Un tiro al larguero que botó sobre la línea o dentro según quien lo diga, y un buen tiro que Toño paró a Pizzi. Anquela metió a Machis y Jaime por Mikel y Orellana. En el 81 Floro conseguía el empate en casi el primer tiro entre los tres palos. Mucho balón colgado, pero sin efectividad. Tras el gol el Granada tuvo dos buenas ocasiones con un tiro de Siqueira desde fuera del área y otra de Jaime desde dentro al botar un corner. Pero el marcador ya no se movería. Un punto que para los dos equipos debe saber a poco, aunque para mi gusto el Depor se mereció más. Al final del partido, la afición mostró su malestar por el equipo. No solo es que no salgan las cosas, a veces se nota la desgana por parte de algunos jugadores.
http://estaticos.sport.es/resources/jpg/0/7/1347812504870.jpgAlgo que llevo comentando desde principio de temporada. Tenemos gente muy buena, pero parafraseando a Mou, no tenemos equipo. Seguimos buscando las individualidades en los hombres de arriba. Tenemos jugadores desequilibrantes, pero que a este nivel de competición no basta. El fútbol es un juego de equipo, y nosotros no jugamos como tal. Abusamos de la conducción, hasta que no aprendamos que la pelota corre más que los jugadores, vamos a ser un equipo muy fácil de parar.
Y si ya de por si tenemos un equipo muy roto entre la línea Iriney-Mikel  y los de arriba, Anquela se empeña en romperla más. Y ya van tantas veces, que me extraña que aún no lo vea. Como si en un manager de PC se tratase, la falta de gol, intenta solucionarla acumulando gente en el área y vaciando la medular. Al igual que el día de Sevilla o Madrid, hoy no hemos trenzado jugadas. Un continuo golpeo de balones en largos a los puntas y que se peleen.
A día de hoy el equipo no juega a nada. Anquela aún no ha definido que es lo que quiere sacar de este equipo. Y empiezan a pasar las jornadas.
Personalmente veo 3 grandes carencias al equipo a día de hoy, que el Mister debería solucionarlas:
http://images.lainformacion.com/cms/nelson-oliveira-supera-a-tono-portero-del-granada/2012_9_16_PHOTO-5f2187f785f13221d4d24a2a4188fe46-1347812604-19.jpg?width=479&height=359&type=height&id=I0qQQ5K7O2Rd0a5uwV7Go2&time=1347812617&project=lainformacion La primera es el problema de meter a jugadores con calzador. Arabi no es el jugador del Caen. No es rápido, es fuerte para pelear que es lo que se le pedía en Arabia. Su puesto es la delantera o media punta, pero no escorado a una banda. Esto tiene el inconveniente de que arriba esta Floro, y en la media se pisa con Orellana. Más que complementarse, se estorban, y habrá que ver ahora, con la figura de Brahimi que también se postula para esa demarcación. Anquela debe mirar por el bien del equipo y sentar alguno y poner a cada uno en su posición. Intuyo que Floro o se pone las pilas, o será el que pierda la partida para colocar al Arabi en punta. Y misma suerte puede correr Orellana si no demuestra lo que se le pide. En breve vuelve Dani Benítez, y la banda y ataque granadinista lo piden a gritos.
La segunda es la construcción del juego. Y es mucha más clara esta carencia con el paso de los minutos. Por momentos Iñigo o Mainz tienen que llegar con el balón hasta el medio campo, sin un solo apoyo, y ante la presión no hay otra más que rifarla. Desde Iriney/Mikel a la delantera hay un espacio abismal. En vez de bajar a pedirla y subirla, tienden a irse al área, con lo que la mitad de las veces el balón no llega. Solo cuando entramos por banda se ve algo distinto, pero son jugadas aisladas de dos jugadores, que no puede ser esa la creación del juego del Granada.
El Granada CF sigue sin ganarY la tercera es la ansiedad. No ha sido un buen calendario. Tener que visitar Madrid y Barcelona de salida deja poco margen de error. Toño esta siendo cuestionado, y eso no ayuda a que este tranquilo. Mainz ha cometido un error infantil. Arriba lo mismo. El equipo está entrando en un estado de ansiedad que hace que no ayuda a que salgan las cosas bien. Una ansiedad que salpica al mister. Con declaraciones poco afortunadas, y cambios erróneos, que más que ayudar para atacar mejor, hacen todo lo contrario.
Barcelona es un campo difícil donde querer recuperar el terreno perdido, pero el partido del Celta se antoja a priori como un punto de inflexión en el equipo. Hay tiempo de reacción, pero las dinámicas negativas pueden hundir hasta los equipos más grandes.

Primero la salud, depués la televisión.



http://t3.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcQXGpVYBFLKJNXfSG7rOV8IcEzg8CTZuQBYnRIS9rhilHaUDvHerY07IUH0rQComenzó la liga con la polémica absurda de los horarios. Partidos de fútbol que comenzaban un domingo y terminaban el lunes. Era verano y no querían poner partidos antes de las 19.00 horas por una amenaza del sindicato de futbolistas. Tal y como abandonamos Agosto, se abandono ese horario de chiste.
Las televisiones mandan, son las que pagan y deciden.  La crisis y los precios no invitan a asistir a los campos de fútbol. Pero si con ello no bastara, el mono de los horarios  como lo llama alguna emisora nacional, sigue dando razones para no ir al campo. A alguien se le ocurrió la maravillosa idea de colocar un partido en Andalucía a las 16.00. Imagino que desde la localidad de sus sofás, con una buena cerveza en la mano lo pasarán bien.
Hoy me ha recordado aquel partido en la 2ª jornada contra el Sevilla Atlético, a las 12 del medio día, Sevilla, Agosto… Los equipos de fútbol están vendiendo su alma (la afición) y se bajan los pantalones por cuatro duros y mal repartidos. La asistencia al fútbol esta cayendo en picado, están matando el espectáculo, y cuando quieran verlo, será demasiado tarde.
Pues tranquilos, dentro de dos semanas, vuelve otro equipo gallego a Granada, y la misma eminencia a decidido, que las 12.00 es buena hora para el fútbol en Granada. Esperemos que el tiempo acompañe, estamos en la ciudad de la Alhambra, esa ciudad que no conoce ni primaveras ni otoños. Con un poco de suerte el último día de septiembre cogeremos nuestras sudaderas o las primeras rebecas.
Sigan velando por el negocio de las televisiones. Pues algún día los estadios estarán vacíos, pero no pasa nada. Seguro que en China agradecen ver un Granada vs Celta, claro siempre y cuando no estén dando alguna competición de Tenis de Mesa, o de Starcraft o cualquier cosa que el maravilloso mercado oriental prefiera. Esa misma gente que quería celebrar la Supercopa de España en la tierra del sol naciente, claro, siempre que fuera Barcelona y Madrid los participantes.

Bienvenidos al fútbol del futuro. Donde prima la televisión y el “espectáculo” a la salud de las personas, tanto aficionados como deportistas. Solo espero que cuando tengamos algún desfallecimiento por las altas temperaturas, suban las cuotas de audiencia y le saquen rentabilidad.

martes, 4 de septiembre de 2012

Real Madrid vs Granada CF, de todo menos fútbol.



No han pasado apenas 9 meses desde la última vez que fui al Bernabeu a ver el Granada cF. La última vez hacía frío, esta vez recién salimos del verano. Y aunque el equipo del Granada ha cambiado mucho, el resultado ha sido el mismo. El típico cuando se juega en casa de uno de los 2 equipos que hacen esta liga tan dispar.
Como cada año, me he propuesto viajar al menos a dos salidas del Granada. Si el año pasado fueron el Pizjuan y Bernabeu, este año tenía pensado salir a la Rosaleda y Camp Nou. Pues cuando el sábado contraté el vuelo para Barcelona con mi hermano, no se les ocurre nada mejor a mis amigos que decirme que ¿dónde se compran las entradas del Bernabeu?
Pues nada, que están de vacaciones y se iban  a ir al Bernabeu a ver el partido. Y uno que es chico fácil de apuntarse a estas cosas, pues a menos de 24 horas para el partido, compramos las entradas y buscar las banderas.
Domingo por la mañana, son las 09:30 y en la puerta de casa nos recogen. 1 coche, 5 personas de las cuales, 1 sevillano, 1 gaditano, 1 granadino, 1 chica que fuera de los partidos de la selección poco fútbol ha visto y yo.
El domingo empieza bien, un buen disco de los cánticos de la afición granadina, para que los nuevos en estas lides  vayan cogiendo el tono y conozcan los “lo lo los” y los himnos del Granada CF.
Cómo todos los viajes de ida, están llenos de vida, de entusiasmo y esperanzas por hacer algo. Los dos momentos del viaje de ida. Enseñar a Laura que con el “lo lo lo” ya se sabe la mitad del repertorio de lo que va a escuchar. Chica lista en menos de 5 minutos ya se sabía todos los ritmos del “lo lo lo”, no como nuestro gaditano que en el viaje a Alcorcón necesito cerca de 1 hora. Y ver la banda sonora del viaje, versionando el “¿Quién quiere leche? De Gustavo Lima.
La ida se hizo amena. Cuando llegamos a Madrid decidimos comer en algún sitio típico de la capital, nos recomendaron “Alfredo o Casa Alfredo”, aun no lo tengo claro, y tras más de 1 hora andando sin rumbo fijo y estar cerca de 20 minutos haciéndonos fotos con los guiris que nos veían pasar con las bufandas rojiblancas bajo las torres Kio. Decidimos ir sobre seguro, en 50 metros teníamos un Mcdonalds. En la puerta se leía “Vuelve la CBO que trajo la revolución del queso a nuestros restaurantes”
¿Vuelve?, pero si esa CBO no la he visto en mi vida. Está claro que en algunas cosas Madrid sigue estando un par de pasos por delante.
Tras la comida, vuelta a los alrededores del estadio, donde pude adquirir nuevas bufandas de equipos con los que ha jugado el Granada a mi colección, Cádiz, Alcorcón, Valladolid, Celta, Udinese, Sevilla, Real Madrid, F.C. Barcelona, Athletic Club y Real Sociedad entre otras.
Aquí terminó nuestra suerte, íbamos a la esquina por donde entraba el autobús del Granada, y la policía nacional nos paraba. No se puede pasar. No conseguimos nada más de ellos, y tuvimos que ver la entrada del autobús desde 50 metros.
Se acerca la hora del partido y entramos al campo. Cómo el año pasado parece estar casi vacío salvo la esquina granadina. Y cuando apenas faltan cinco minutos empezó a entrar la gente. Los asientos deben doler a los madridistas, pues si entran apenas cinco minutos antes, con cerca de un cuarto de hora, empezaban a marcharse lo primeros.
Compramos las entradas en el mismo lugar aproximado del año pasado, pero este año han venido muchos menos seguidores. A mi derecha mis compis de viaje, a la derecha una familia del Madrid (maldita la hora que dejan entrar con trompetitas a los campos, aún me pita el oído izquierdo). Detrás una familia Venezolana, imagino que serían nuestros siguiendo al bueno de Machis y delante unos suecos, que acababan de gastarse 80€ en la equipación del triste y taciturno Ronaldo.
Comienza el partido, un gol, dos goles, tres goles y final del partido. Detrás de una portería y tercer anfiteatro. Como añoré mi sitio centradito del nivel bajo de preferencia en los Carmenes. Que bien se ve el fútbol en los Carmenes rodeado de la gente de siempre.
Era tarde y quedaba un largo viaje de vuelta. Y cuando nos alejábamos del murmullo del estadio en busca del coche, oímos como alguien balbucea, “esta es tu grada!” nos giramos y es Laura. Le cuesta, y entre la fatiga y la vergüenza consigue terminar de cantarla sola. Apenas cinco horas antes, nos decía que nada de ponernos camisetas ni bufandas del Granada, no vayamos a que algún radikal nos fuera a meter en un lió. Y ahora la teníamos ahí, con una camiseta Patrik  de cuando Gorka Pintado y Ocaña jugaban en el Granada, por Madrid y cantando uno de los cánticos más sonados en los Carmenes. Esto huele a nueva aficionada pronto por los Carmenes.
El viaje de vuelta fue largo y soporífero. Lo que duró la batería del movil, para ver las reacciones por Twitter del partido y comentar las mías propias. La carretera larga y bien iluminada de Castilla. No te encuentras ni 2 kilómetros, donde no ves una “bar de carretera” con buenas luces de neón.
Cerca de las cinco de la mañana, por suerte ese lunes yo no tenía que madrugar, no podré decir lo mismo el día de Barcelona. Ahora a descansar y en tres semanas escasas me espera la ciudad Condal. Esperemos que el vuelo haga más llevadero el viaje.